BCRA prevé suba del 2,3% en las prestaciones de Anses para enero: La proyección del Banco Central sobre la variación de precios volvió a poner en agenda el posible ajuste que recibirán las prestaciones administradas por Anses a partir de enero. Con una inflación estimada del 2,3 por ciento, el cálculo impactaría directamente en los haberes de jubilados, pensionados y en los montos de asignaciones como la AUH. Aunque falta la confirmación oficial, el dato ya generó expectativas entre millones de beneficiarios que esperan comenzar el año con un ingreso actualizado.
A continuación se detalla un análisis completo sobre cómo podría aplicarse esta suba, quiénes la recibirían y qué esperar para el primer mes de 2026.
Por qué el BCRA proyecta un aumento del 2,3 por ciento
La previsión surge de los informes técnicos que el Banco Central actualiza mensualmente tomando como referencia el comportamiento de la inflación. La estimación del 2,3 por ciento para enero forma parte del escenario esperado para el cierre del año anterior y el comienzo del siguiente. Estos cálculos no son determinantes, pero sí se consideran como base para las actualizaciones automáticas previstas en la nueva metodología de movilidad.
El índice previsto se encuentra por debajo del promedio anual, lo que indica una posible desaceleración de los precios en sectores clave. Esto genera un marco más estable para ajustes moderados en las prestaciones de Anses, especialmente aquellas que dependen del Índice de Precios al Consumidor.
Qué prestaciones podrían actualizarse en enero
El impacto potencial de la suba alcanzaría a jubilados, pensionados y titulares de la Asignación Universal por Hijo. La movilidad mensual vigente utiliza la variación estimada de inflación para definir los incrementos transitorios mientras se consolida el nuevo esquema de cálculo.
En el caso de las jubilaciones y pensiones, el ajuste del 2,3 por ciento se aplicaría sobre los haberes que hayan sido liquidados en diciembre, lo que permitiría iniciar el mes con un monto actualizado. Las asignaciones familiares, incluida la AUH, también se verían alcanzadas por este incremento, reflejando el mismo porcentaje de actualización.
Si bien la cifra no representa una suba significativa en términos reales, es importante destacar que forma parte de una dinámica mensual destinada a evitar grandes retrasos frente a la inflación acumulada.
Cómo se vería reflejado el aumento en los haberes jubilatorios
Para comprender el impacto real, es útil observar cómo se traduciría la suba estimada sobre los montos vigentes. La jubilación mínima, que actualmente ronda valores ajustados en diciembre, recibiría un incremento equivalente al 2,3 por ciento. Esto significaría una mejora que, aunque pequeña, contribuye a mantener el poder adquisitivo durante un mes especialmente cargado de gastos.
Los haberes medios y superiores también se actualizarían bajo el mismo índice. La aplicación uniforme facilita la previsibilidad para quienes planifican gastos fijos como alquileres, medicamentos y servicios.
Este aumento, si se confirma, se sumará a los bonos extraordinarios que el Gobierno decida otorgar para compensar la brecha entre la movilidad y la inflación real. Aunque todavía no se anunciaron refuerzos para enero, es habitual que se evalúen en función del contexto económico.
Qué pasará con la AUH y las demás asignaciones
La Asignación Universal por Hijo depende del mismo esquema de actualización mensual que las prestaciones previsionales. Por lo tanto, la AUH recibiría una suba del 2,3 por ciento en caso de que el Gobierno ratifique la proyección del Banco Central.
El aumento abarcaría tanto el monto total como el porcentaje retenido que se cobra una vez al año. Esta corrección mensual es clave para las familias que dependen del beneficio para cubrir gastos escolares, alimentación y servicios esenciales.
Las asignaciones por embarazo, prenatal y por hijo con discapacidad también entrarían en el esquema de actualización previsto para enero. El ajuste automático simplifica el cronograma, evitando retrasos administrativos o la necesidad de resoluciones específicas.
Quiénes recibirán el aumento automáticamente
El incremento proyectado se otorgará de forma automática a todos los beneficiarios alcanzados por la movilidad mensual. No es necesario realizar trámites adicionales ni presentar documentación. Anses aplica los cambios directamente en la liquidación correspondiente a enero.
Esto incluye a:
- Jubilados y pensionados del SIPA
- Titulares de pensiones no contributivas
- Pensión Universal para el Adulto Mayor
- Beneficiarios de AUH
- Asignación por Embarazo
- Asignaciones familiares del SUAF
El aumento se verá reflejado en el recibo de haberes y en la consulta de pagos disponible en la web de Anses y en su aplicación móvil.
Cuándo se acreditarán los haberes de enero
Tal como es habitual, los pagos de enero seguirán un cronograma escalonado según la terminación del DNI. Aunque aún no se publicó la grilla oficial, se espera que el calendario mantenga el orden que aplica cada mes.
Los jubilados de la mínima suelen cobrar durante la primera quincena, mientras que quienes reciben haberes superiores perciben sus pagos en la segunda. Las asignaciones familiares y la AUH también mantienen su calendario inicial en las primeras semanas del mes.
Es importante que los beneficiarios revisen el calendario oficial en cuanto sea anunciado para confirmar la fecha exacta de acreditación.
Qué significa este aumento dentro del contexto económico
El ajuste del 2,3 por ciento representa una actualización moderada en comparación con los picos inflacionarios registrados años anteriores. Si bien no compensa por completo la pérdida acumulada, forma parte de un mecanismo de corrección mensual que busca reducir el impacto de la inflación sobre las prestaciones básicas.
Para los jubilados, pensionados y familias que dependen de asignaciones sociales, cualquier ajuste, incluso mínimo, es relevante para sostener gastos de alimentación, transporte y salud. La expectativa está puesta en que la estabilidad proyectada por el Banco Central permita aumentos graduales sin retrocesos en el poder adquisitivo.
Qué se puede esperar para los próximos meses
Las proyecciones oficiales indican que la movilidad mensual seguirá vigente mientras el Gobierno define un esquema definitivo de actualización trimestral. Esto significa que cada mes podrá haber ajustes similares, siempre sujetos a la evolución de la inflación y a las decisiones económicas del Ejecutivo.
Si los índices se mantienen estables, es posible que las subas sean menores pero más previsibles. En cambio, si la inflación se acelera, podría retomarse un ritmo de incrementos más elevados.
Lo cierto es que enero marcará el inicio del nuevo ciclo de actualizaciones, y el 2,3 por ciento proyectado es la primera referencia concreta de 2026.
